¿Quieres que nos manyemos?
Cada vez que voy a la jato de Slayer para hablar, huevear, tocar guitarra y dar conciertos privados para nosotros y nuestros fantasmagóricos espectadores en JustinTV terminamos hablando de flacas. Y, ahora, de flacos. Él me cuenta como le fue con la tipa que conoció en año nuevo, que estuvo bravazo, que jodieron a una huevona, que se cachó a otra y bla bla bla. Yo le digo que yo también tuve mi buen año nuevo por mi bi-agarre, lo cual lo llena de una alegría sin expectativa. El huevas tiene la esperanza de que conozca a una chica que haga que se me pare y me vuelva hombre.
Como la verdad me da flojera rebatirle lo que dice, simplemente me cago de risa y le digo una y otra vez que él la tiene fácil. En principio, la iglesia lo quiere, su familia no se estresará cada vez que sale, cumplirá con la sociedad y puede conocer a cualquier flaca en una esquina (no necesariamente una puta); mientras que yo estoy forzado de por vida a usar capuchón (para la lógica prevención) y a tratar de encontrar el amor en alguna discoteca grotesca, chat de la misma calaña o linea gay que la verdad, no es mejor que las anteriores.
Entonces me cuenta que hacía dos noches, a través del Skype, medio borracho luego de una juerga, tiene una invitación de una chica de México. Del DF para ser más específico. Él, ni tonto ni perezoso, mira la "carolina" para ver si la chica pone o no y se da cuenta que sí. La acepta y la chica se encontraba en línea en ese momento.
En verdad, no creo en el amor por computadora. Ya no. Es decir, antes tenía la esperanza de que pudiera ser real, por alguna extraña manera dos personas pudieran conversar, cagarse de risa, adivinar lo que el otro piensa, y hasta verse por fotos y seguir con una buena química; pero despues de lo que pasó con Miguel me he vuelto apático, cerrado, cagón en una conversa. Como lo dije, ya no creo que pueda volver a manyar a un chico como él.
Fuera de mi experiencia, es bieeen pendejo manyar a un pata, es la verdad. No puedo entender como antes del apogeo del msn, del chá, del facebook y el amixer Hi5 la gente conocía a hombres o mujeres de su misma opción sexual. La universidad puede ser un referente, pero no es el mejor. La Pacífico, digamos, no se caracteriza por ser tan open minded en ese sentido, aunque me han contado de cierto círculo de gente gay que había, casi todos con código 2002 para menos. Lástima que ingresé dos años después. Una discoteca, quizás sí, pero la gente caleta como yo todavía tiene cierta reticencia a caer en uno de ellos. Solamente puedo estar agradecido con el msn, que te permite conocer una cantidad inenarrable de gente y, gracias a la foto que se pone, ahorrar el chongo de manyar a alguien quien no está a tus expectativas.
Ahora me he dado cuenta que es casi como si fuera un manual paso a paso. Si no te gusta ir a discotecas gay y eres roño para pagar teléfono, te queda el chá. El procedimiento es el siguiente: entras, conversas con cualquier pata, se intercambian correos electronicos falsos o verdaderos, dependiendo del nivel de seguridad del broer en cuestion y de ahi hacen small talk que puede ser la cagada o cagado. De ahí puede que queden en algun día conocerse.
Wow, lo he hecho tantas veces que ya da flojera hacerlo una y otra y otra vez.
Ahora, cuando la conversa va de la pm, y el pata no es un loco que te dice para salir en la madrugada, alguno, algún día, puede soltar la pregunta del millon, la de arriba como título. Claro que no es tan directa. Algunos prefieren caletearla de la manera más normal como con un: "hace tiempo que quería ir al cine a ver tal pela, pero no hay con quien". O "estoy aburrido y no tengo nada que hacer más tarde". Con eso se puede interpretar que el pata quiere que se lo preguntes porque tiene tal interes en tí que te deja ver esa timidez natural.
Por otro lado, los más lanzados te pueden lanzar el "cuando nos manyamos eh". Ahora, no es cierto que a veces uno quiere simplemente conocer a alguien y ya. Mucho rodeo jode y a veces puede poner de mal humor a otro y cagar una buena conversa. Sin embargo, encontrar el tacto para preguntar esas cosas, encima a través de una herramienta que no deja ver emociones, pues es un toke complicadin.
El primer tipo de persona fue Pablo. Hablamos poco tiempo, pero se mostró bastante... delicado, en el sentido de no expresar astutamente o con concha algunas cosas. Como le tenía cierta confianza, y porque Telefónica te permite bloquear números que te acosen, le di mi número y hablamos por ahí una noche hasta las 2 am. Si, que huevadas, me dije, no dejaré que un huevón con quien ni siquiera pasó nada me marque para siempre. Mientras me decía que hacía tiempo no salía, le dije para manyarnos. Algo así como un aja aja aja, ya, cállate y ven pa´acá.
La salida fue de lo más tela. Ya sabía que era poco agraciado (la verdad soy un chico de low-standards en ese aspecto) pero como la conversa era interesante, al verlo me dije ok, ok, solo estaré perdiendo a lo mucho una hora de mi vida.
Manyarlo no fue poco interesante. Me enteré de sus dramas de la vida, cosas que no necesitaba saber, me encontré con "patas" de la universidad que no saben que soy gay y además me dijo gordo y huevón dos veces, peyorativamente.
Ajá, toda una joyita. Luego me pregunta que cuando salimos de nuevo. Fuiiiiiiiiira.
Pero como Dios, Ala, Buda y Jebús son grandes, tambien encontré otro extremo. Sino lean nomás al ultimo broder que conocí, Franco. Simplemente me conecté una vez que regresé de mi chamba el lunes y no pasaron más de 10 minutos de conversa ligera para que me dijera que nos manyáramos. Antes de eso, ya habpiamos conversado habra sido, dos dias, pero no fue mucho. Eso si, contamos algunas cosas interesantes, pero nada como para marcar el punto de "es el momento de manyarse". Vive cerca de mi casa (según él), así que acordamos encontrarnos en un lugar céntrico para ambos. Admito que simplemente fui porque no tenía nada que hacer, así que no me hice ilusiones ni nada parecido.
A pesar de que llegué tarde (un mal hábito que nunca se ha pegado a mi vida laboral), Franco aún estaba ahí. Conversamos de lo más normal, dejó en claro que no era el tipo de loco que busca sexo por internet, porque ya lo había hecho cuando era chibolo. Que ahora tenía la cabeza en la tierra, que era más centrado y que le preocupaba su chamba más que nada.
Regresé a mi casa de lo más normal, ya que en menos de 5 dias había conocido a dos chicos interesantes. Uno al que no volveré a hablarle tanto, y otro al que espero hablarle de nuevo. El año pasado eso no me había sucedido, ni lo hubiera esperado. Manyar chicos es complicado, no me augura un futuro con final feliz, pero vale la pena el intento.